Todos podemos transmitir energía a través de las manos y así lo hacemos intuitivamente cuando nos duele algo y las llevamos rápidamente al sitio dolorido. De este modo también los niños encuentran en el calor de las manos de su madre un alivio eficaz a sus molestias. Es un don natural, perdido en muchos casos y que es fácil de recuperar y potenciar.
Estamos vivos porque la fuerza vital fluye y alimenta a los órganos y células del cuerpo, manteniéndolos en equilibrio. Cuando se interrumpe este flujo se produce una disfunción en el cuerpo físico y aparece la enfermedad. Reiki reestablece la corriente energética y ayuda a disolver los bloqueos.
Es muy relajante y ayuda a eliminar el estrés. También sirve para potenciar metas y cualidades, sanar traumas del pasado, corregir hábitos perjudiciales, aceptarme a mí mismo, sentirme en armonía y en paz.
El sistema Reiki Tao fusiona el don natural de sanación a través de las manos con el equilibrio y la conexión a Tierra del Tao.
